[Artículo] Tasa de Mortalidad Estandarizada (TME): Qué es, cómo calcularla y por qué monitorear este indicador en la UCI
Con base en la puntuación de gravedad SAPS 3, es posible estimar la mortalidad hospitalaria esperada para un grupo determinado de pacientes ingresados en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI). La Tasa de Mortalidad Estandarizada (TME) nos permite evaluar si los resultados observados están por encima, dentro o por debajo de lo esperado, considerando la gravedad de las condiciones de los pacientes.
¿Cómo se calcula la TME?
El cálculo de la TME es sencillo:
TME = Mortalidad observada / Mortalidad esperada
La mortalidad observada se refiere al porcentaje de pacientes que fallecieron durante la hospitalización en el período analizado, mientras que la mortalidad esperada se estima utilizando SAPS 3. Por ejemplo:
- Mortalidad observada: 16%
- Mortalidad esperada: 20%
- TME = 0,8
En este caso, una TME menor a 1 indica que la mortalidad observada fue menor a la esperada, sugiriendo buenos resultados de atención médica para el perfil de paciente analizado.
¿Por qué es tan importante monitorear la TME?
Para obtener la atención médica:
- Evaluación de la calidad de la atención prestada: La TME refleja el desempeño clínico ajustado a la gravedad del paciente, lo que permite una evaluación más justa de los resultados.
- Identificación temprana de desviaciones: los aumentos en TME pueden indicar la necesidad de revisar protocolos, flujos de trabajo y prácticas clínicas.
- Promoción de la mejora continua: es un indicador objetivo que apoya iniciativas para mejorar la calidad y la seguridad del paciente.
- Estímulo a la discusión multidisciplinaria: favorece el diálogo estructurado entre médicos, enfermeras, fisioterapeutas y otros profesionales.
- Base para auditorías clínicas y retroalimentación: facilita la revisión de casos y eventos adversos respaldados por datos confiables.
Para la gestión (administrativa, institucional y estratégica):
- Evaluación del desempeño ajustado al riesgo: Permite comparar las UCI de forma más justa, considerando la complejidad de la atención médica.
- Toma de decisiones basada en evidencias: los datos de TME respaldan las decisiones sobre la asignación de recursos, la revisión de la capacidad instalada y las inversiones en equipos y tecnologías.
- Transparencia y rendición de cuentas: útil en informes institucionales y reuniones con proveedores de atención médica, comités de calidad y patrocinadores.
- Apoyo a programas de excelencia y acreditación: es un indicador valorado por los organismos acreditadores y en los programas de gestión basada en resultados.
- Fortalecimiento de la cultura de datos e indicadores: promueve la integración entre la gestión clínica e institucional, con un enfoque en el valor y la eficiencia.